sábado, 29 de octubre de 2011

Transsiberian

Título Original: Transsiberian
Año: 2008
País: España-Reino Unido-Alemania
Director: Brad Anderson
Género: Thriller
Reparto: Woody Harrelson, Emily Mortimer, Kate Mara, Eduardo Noriega, Ben Kingsley, Thomas Kretschmann

SINOPSIS

Tras una temporada en Pekín, Roy (Woody Harrelson) y Jessie (Emily Mortimer) deciden viajar a Moscú en el Transiberiano, el ferrocarril que une la Rusia europea con las provincias rusas del Lejano Oriente. Aunque la gente que viaja en el gigantesco y sombrío tren es bastante extraña, la pareja no tarda en entablar relación con sus compañeros de compartimento, Carlos (Eduardo Noriega) y Abby (Kate Mara), y con el inspector Grinko (Ben Kingsley), que investiga el asesinato de un narcotraficante.

CRÍTICA

Considero que esta película merecería una nota muy alta en lo que a producción se refiere. Notable también me ha parecido el reparto de actores. Por otra parte, creo que el ritmo de la cinta es el adecuado: más lento para recrearse en escenas costumbristas y para presentarnos a los personajes al principio, y rápido a medida que se van sucediendo los acontecimientos. El pero: que el director, (Brad Anderson, "El maquinista - 2004"), sea norteamericano, o lo que es lo mismo, que la película tire del manido cliché de los thrillers yanquis: los españoles somos unos "vivalavirgen", los rusos unos mafiosos muertos de hambre y los americanos los más íntegros, valientes y valerosos de todo el planeta. En fin, si uno se abstrae de esto sí es cierto que la película se deja ver.

Del reparto no dudo ni un instante por quién comenzar: con el veterano británico Ben Kingsley y no por peinar canas. Este actor de ascendencia musulmana y judía, cuenta en su filmografía (entre otros) con los siguientes títulos: "La lista de Schindler - 1993", "Inteligencia artificial - 2001", "Oliver Twist - 2005" o "Shutter Island - 2010". Su interpretación, si bien reconociendo que el papel pareciera hecho ad hoc para él, me ha parecido magnífica. Por una vez, y sin que sirva de precedente, adjudico buena nota a su doblaje español, valorando en este caso también, la dificultad añadida de los acentos.

Con Emily Mortimer me ha ocurrido una cosa curiosa. Me ha convencido dependiendo del momento, y no puedo extrapolarlo a que crea que la actriz no es buena transmitiendo una determinada emoción. Quizás si me parece algo falta de expresividad facial. De todos modos, definiría su actuación en "Transsiberian" como correcta. Por otra parte, no recordaba haberla visto anteriormente en ninguna película. Algunas en las que esta inglesa ha participado que me han parecido más notables son: "Los demonios de la noche - 1996", "Notting Hill - 1999", "Scream 3 - 2000", "Match Point - 2005" o "Shutter Island - 2010". Un apunte sobre ella que me ha parecido curioso: estudió ruso en su juventud.

Respecto a Woody Harrelson, decir que pese a dar vida al personaje más estereotipado y desde mi punto de vista, con menos matices, me ha convencido. Además de ser conocido por su papel en la famosa serie "Cheers", ha participado en cintas como "Una proposición indecente - 1993" o "No es país para viejos - 2007". Cosillas curiosas sobre él: partidario de la legalización de la marihuana, es pacifista y activista del movimiento ecologista.

Sigamos con el reparto hablando del único representante de nuestra España cañí: Eduardo Noriega. La mayoría de las críticas que leo sobre él suelen ser nefastas. No sé si por eso, (una va condicionada esperando lo peor), a mí no suele disgustarme. De hecho, creo que es un actor al que se le ha notado una mejoría considerable a lo largo de los años. En el caso de "Transsiberian", su papel, sin entrar en muchos detalles que puedan fastidiar, es más rico de lo que pudiera parecer en un principio. En fin, sin decir que su actuación sea portentosa, sí la considero adecuada a las circunstancias.

Continuemos con la que para mí ha sido un auténtico descubrimiento: la actriz estadounidense Kate Mara. Considero su participación en esta película, pese a su personaje secundario y casi carente de guión, muy digna. Me ha parecido realmente expresiva, especialmente con el uso de su mirada. Buena nota por tanto para ella.

Finalizo con el secundario Thomas Kretschmann, que en esta cinta interpreta al sicario ruso Kolzak. El trabajo como actor de este alemán se ha desarrollado especialmente en su país de origen. Debido a su apariencia ha interpretado numerosas veces, papeles de oficiales del periodo del Tercer Reich, como en el caso de su participación en "El pianista - 2002" de Polanski. Respecto a su interpretación en "Transsiberian", diría que dentro del reparto, resulta uno de los más creíbles.

En resumen, cinta que cubre las expectativas de un thriller correcto.

viernes, 28 de octubre de 2011

El balneario

SINOPSIS

En los balnearios nunca pasa nada hasta que pasa. Es entonces cuando se pierden las maneras, el decoro, la templanza, el bisoñé, la salud e incluso la vida. Cada novela del ciclo Carvalho responde a un nuevo desafío circunstancial, como si el autor rechazara partir de la fórmula que ha utilizado en la anterior. Casi tres años después de "La Rosa de Alejandría", Vázquez Montalbán volvería a meter a su personaje más constante en una novela. Pero en este caso Carvalho ni viaja ni come, y tiene que ingeniárselas para poder quemar un libro a hurtadillas. Sin embargo es una novela de gastronomía, de gastronomía caníbal, podría decirse. Fábula de la conducta individual y social de "viejos" y "nuevos" europeos, escrita en clave de humor y de terror suave. Un terror de balneario.



CRÍTICA

Confieso que es la primera novela que leo de Carvalho, y así, nada más comenzar, adelanto que casi con toda seguridad, no será la última. El estilo de "El balneario", me ha recordado bastante al de Eduardo Mendoza en "El laberinto de las aceitunas". He recordado que en la crítica relativa a esa novela, escribí parte del prólogo que realizó Fernando Marías. Curiosamente en él mencionaba a Manuel Vázquez Montalbán y a la novela policíaca española, diciendo lo siguiente: "En los últimos años 70 y primeros 80, narradores como Manuel Vázquez Montalbán, dieron brío, personalidad propia y razón de ser a esta fórmula con la creación de personajes y títulos memorables. Pero su propuesta quería voluntariamente surgir de la venerada fuente norteamericana, y asumía por ello todos los fundamentos originales de lucidez triste, desencanto y oscuridad."

Como comenzaba diciendo, hasta el momento sólo he leído una novela de la serie, pero ciñéndome a "El balneario" discrepo bastante de esta opinión. Es cierto que recurre a la novela norteamericana pero más para ironizar sobre ella que como posible fuente de inspiración. Por otra parte, el libro no me ha parecido oscuro y triste, diría que todo lo contrario. De hecho, en él abunda el humor, la burla, y al igual que en el caso de Eduardo Mendoza, también la picaresca española. Otra similitud con este escritor es que la novela policíaca no resulta más que la escusa para mostrar al lector el costumbrismo de la época española describiendo los hábitos y relaciones entre los distintos estratos sociales.

Mi único pero: que Carvalho queme un libro y que para colmo esto sea una costumbre recurrente del personaje. El propio Vázquez Montalbán se riñe mediante el personaje del inspector Serrano: "... pero las cosas escritas ya no convencen a nadie. ¿Conoce usted a alguien que crea en las palabras escritas?. Pues bien, a pesar de esta conclusión, y fíjese que tiene que ver con el origen de la conversación, porque usted quema libros y Sánchez Bolín los escribe, yo jamás quemaría un libro... Pero yo no podría quemar libros. Para mí son sagrados. Si consideró que son malos y corruptores, no los leo, pero tampoco los quemaría como usted hace. Y le diré por qué, amigo. Porque a mí me han educado en un respeto a todo lo que cuesta esfuerzo, y hacer un libro cuesta esfuerzo y no lo puede hacer todo el mundo."

PUNTUACIÓN:

domingo, 23 de octubre de 2011

La Dama Azul

SINOPSIS

En 1629, una expedición de padres franciscanos alcanza las inhóspitas tierras de Nuevo México. Allí se encuentran con algunas tribus indígenas que afirman haber recibido la visita de una extraña mujer, a la que ellos llaman la "Dama Azul". ¿Una aparición de la Virgen o algo más?. El incidente llega a oídos del papa Urbano VIII, quien ordena una investigación cuyos resultados nunca se harán públicos.


Tres siglos y medio más tarde, diversas "fuerzas" luchan por hacerse con el secreto de las apariciones. La inquisición contabiliza más de quinientas bilocaciones gracias a una fórmula secreta. El temor, sin embargo, no está en que alguien se apodere de dicha fórmula, sino que con su robo se descubra un complot eclesiástico que podría minar la fe de millones de cristianos.

CRÍTICA

Este libro, llevaba desde la noche de los tiempos en la estantería de mi habitación muerto del asco. Las veces que cogía el tomo, confieso que su autor me disuadía para comenzarlo. Pese a mis reticencias, la novela ha resultado ser una grata sorpresa. Desde mi punto de vista, con ella Javier Sierra no tiene nada que envidiarle a "El código Da Vinci" de Dan Brown. Incluso diría que la temática que trata "La Dama Azul" resulta bastante más original.

No sólo me ha parecido interesante el argumento, sino también el propio estilo del escritor. Por ejemplo, la trama además de estar compuesta por hechos ocurridos en el pasado y en el presente, cuenta con varios personajes principales, sin poder destacarse un único protagonista. Pese a estas premisas, el lector no cae en un caos producido por el exceso de personajes, los cambios temporales y el exceso de localizaciones gracias a la estructura del libro. Está compuesto por capítulos cortos que hilan perfectamente la historia, de manera que ésta va adquiriendo significado. Por otra parte, me han parecido especialmente buenos los fragmentos del libro que se desarrollan en el siglo XVII, no sólo por las cuidadosas descripciones que logran una exquisita ambientación, sino también por los diálogos entre los personajes que añaden realismo y verosimilitud. Es más, diría que se puede apreciar en cada una de las páginas de la novela, el trabajo de documentación y posterior encaje que el escritor ha realizado.

Quizás los únicos "peros" sean los siguientes. Por una parte, "La Dama Azul", que por cierto es la primera novela de Javier Sierra, fue escrita en 1998. Es comprensible por tanto que las partes en las que el escritor hace referencia a ciertas innovaciones tecnológicas resulten anticuadas. Por otra parte, desde mi punto de vista, el final puede resultar algo abrupto y poco cerrado. No obstante, he leído que en 2007 la obra fue revisada por su autor para su lanzamiento internacional, siendo reescrita y ampliada en muchos de sus capítulos. Es posible por tanto que esto sea diferente en la nueva versión publicada.

Otro dato de interés, en 2008 dicha versión fue elegida por el BEA ("Book Expo America", la mayor reunión de editores y profesionales del sector del libro de Estados Unidos) como la mejor novela histórica del año en EE.UU.

Concluyendo: por todo lo dicho, es muy posible que me anime con otras novelas de este escritor y por supuesto recomiendo la lectura de "La Dama Azul."

Puntuación:

sábado, 22 de octubre de 2011

El reloj asesino

Título Original: The Big Clock
Año: 1948
País: USA
Director: John Farrow
Género: Cine negro
Reparto: Ray Milland, Charles Laughton, Maureen O'Sullivan, George Macready, Rita Johnson, Elsa Lanchester, Harold Vermilyea

SINOPSIS

George Stroud (Ray Milland) es un importante periodista que trabaja en una publicación especializada en crímenes, que se ve obligado a realizar jornadas de trabajo maratonianas por orden de su despótico jefe, Earl Janoth (Charles Laughton), quien no atiende a razones. Un día se produce un horrible crimen en el que una mujer es asesinada (Rita Johnson), siendo el principal sospechoso Stroud. Pronto se iniciará una carrera contrarreloj en la que tendrá que demostrar su inocencia y de paso descubrir al verdadero culpable.

CRÍTICA

Me ha sorprendido encontrarme con un "thriller" de acción trepidante realizado antes de los años 50, que nada tiene que envidiarle a los actuales. El director de la cinta es el también guionista australiano John Farrow. Un "gossip" interesante: Fue el padre de Mia Farrow, hija de su matrimonio con la actriz irlandesa Maureen O'Sullivan, la cual aparece en esta cinta interpretando a la esposa de George Stroud, el periodista protagonista. Pese a las restricciones impuestas por su papel (secundario y para más inri ama de casa abnegada) su actuación me ha parecido buena. Ray Milland es el actor que da vida a su "partenaire" en la ficción. De este galés ya había comentado en una crítica pasada sobre otra de sus películas: "El ministerio del miedo" Su trabajo en esta ocasión me ha gustado aún más, quizás ayudado por la interesante trama y por las características de su personaje.

Si en una película de este tipo es importante el protagonista, tanto o más resulta el villano. En este caso encarnado por el gran Charles Laughton. De él dijo Billy Wilder "que se trataba del mejor actor con quien nunca había trabajado". Personalmente comparto la excelente opinión. Como olvidar la soberbia interpretación de éste dando vida al cascarrabias Sir Wilfrid Roberts en "Testigo de cargo - 1957",  adaptación al cine de este mismo director de la novela homónima de Agatha Christie. Sin embargo, en "El reloj asesino", confieso que en algunos momentos me ha parecido algo sobreactuado.
Curiosamente, nos encontramos con otra pareja que coincide en esta película pues el reparto cuenta también con la actriz Elsa Lanchester, su esposa desde 1929. Ambos trabajarían juntos en varias ocasiones, como por ejemplo en la anteriormente mencionada "Testigo de cargo", donde Elsa interpretaba a la enfermera del abogado. En la película que nos ocupa, Elsa encarna a una excéntrica pintora. Su personaje aunque secundario, es el encargado de aportar algunas pinceladas de humor al film. De esta actriz también había hablado anteriormente por su participación en la película "La calle del misterio." Al igual que en aquella ocasión, vuelvo a reiterarme en el nefasto doblaje, apostando a que se trata de la misma voz. Otro "gossip". En sus memorias, Elsa reveló que Charles Laughton había sido homosexual, no obstante, continuaron casados unidos por otros aspectos como el profesional. Un último dato sobre Laughton, además de actor fue director. Una de sus películas que se encuentra a la espera en la "karumbe-filmoteca" es "La noche del cazador - 1955."

Sigamos con el reparto. George Macready encarna a Steve Hagen, mano derecha del despótico director del periódico. Su trabajo en la cinta me ha parecido uno de los mejores. De hecho, a lo largo de su carrera este estadounidense en la mayoría de los casos interpretaría el rol de villano. Entre su filmografía podemos encontrar películas tan importantes como "Gilda - 1946", "Senderos de gloria - 1957", o "Su propia víctima". Termino con los actores mencionando a Harold Vermilyea, secundario que en esta ocasión da vida a uno de los investigadores del periódico. Voy a presumir de buena memoria, pues he recordado su participación en otra película que mencioné en el blog hará ya un tiempo: "Voces de Muerte".

Concluyo. Interesante historia, acción trepidante cargada de intriga y excelente reparto. El único pero es el enfoque machista de los personajes femeninos pero sin duda producto de la época. En resumen, muy recomendable.

Puntuación:

viernes, 21 de octubre de 2011

Más Platón y menos Prozac

SINOPSIS

¿Puede la filosofía combatir los problemas y dificultades cotidianos?. Es lo que propone "Más Platón y menos Prozac", aplicar nuestra filosofía a nuestro sistema de vida para alcanzar un mayor equilibrio interior. Se trata de considerar la filosofía como una forma de vida más que como una disciplina, idea que existe desde Sócrates. "Más Platón y menos Prozac" se inspira en los más importantes filósofos de la historia para enseñarnos a afrontar los principales y más habituales aspectos de la vida, como el amor, la ética, prepararse para morir o simplemente enfrentarse a un cambio en el trabajo.

Un libro diferente que, con sencillez, nos acerca al pensamiento de grandes filósofos como Platón, Sócrates o Kant y demuestra que la filosofía puede ser una buena opción para lograr una vida más satisfactoria.

CRÍTICA

Se me estaban acumulando películas y libros finalizados, pero lo cierto es que apenas consigo sacar un rato para poder sentarme a escribir sus respectivos post. Paradójicamente a mi falta de tiempo, además de las clases en la piscina y de inglés, me he lanzado a apuntarme en dos cursos de formación que ofertaban en mi empresa: "Comunicación interpersonal en las organizaciones" y "Gestión de la calidad". Con todo me he refrenado ,(¿será aquello de a caballo regalado...?), pues había otro títulos sugerentes: "Creatividad", "Negociación" y "LOPD". Los que tenía descartados desde el comienzo fueron "Finanzas para no financieros" (gestionar cuando no se tiene, no necesita ciencia ^_^) y "Trabajo en equipo". Éste último me provoca hilaridad, quién puede dudar que lo de trabajar en equipo no es más que una quimera. Vamos, que saldría más a cuenta comprarse el ceranova y tratar de triunfar haciendo boñigos con su torno. En fin, los dos cursos en cuestión tienen una duración de 50 horas. Comienzan en noviembre y tengo hasta finales de año, no sé por qué pero comienzo a arrepentirme ...

En fin, dejo de divagar. El libro, en líneas generales, me ha gustado, en parte producto del momento actual en el que me encuentro, pues unos diez años atrás lo hubiera criticado sin piedad. Por otra parte, me parece que la sinopsis al decir "[...] para enseñarnos a afrontar los principales y más habituales aspectos de la vida [...]" puede llevar a engaño. Creo que es un error leer este libro confiados en que éste nos dirá como tenemos que actuar y comportarnos. En ese sentido, el autor es sincero desde el principio. Defiende que todos nosotros poseemos nuestro propio esquema filosófico y que el libro en todo caso sería como una matrona que nos puede ayudar a encontrarlo. Respecto al escritor, creo que Lou Marinoff enfoca cada una de sus páginas teniendo presente como último destinatario a la sociedad americana. La única ventaja de esto es que resulta un enfoque eminentemente práctico.

Por otra parte, lo que más me ha gustado del libro es el capítulo en el que realiza un breve repaso por las distintas corrientes filosóficas, donde presenta conceptos breves sobre algunas ideas filosóficas importantes de sus escuelas y pensadores. En definitiva, leerlo, me ha proporcionado algunos momentos balsámicos, que no es poco. Además de recomendarlo, continuaré posteando con algunos de sus fragmentos.

Puntuación:

miércoles, 19 de octubre de 2011

¿Qué es el bien?

¿Qué es el bien?. Perspectivas procedentes de la filosofía oriental.

La doctrina del ahimsa, o del no daño. Se trata de uno de los dogmas principales de la filosofía hindú, tomada del jainismo, cuya práctica significa actuar asegurándose de no causar daño a los seres sensibles. Es, sin duda, una forma muy sencilla de medir el bien.[...]

Para los hindúes todas las cosas están conectadas, de ahí que no restrinjan la aplicación del ahimsa a los seres humanos. De hecho, sostienen que la avidya (la ignorancia ciega, o hacer daño sin darse cuenta) no le ahorra a uno las consecuencias de hacer daño.[...] Esto significa ser muy cuidadoso con lo que se piensa, se dice y se hace.

La filosofía china adopta un enfoque más práctico de la ética de la virtud para definir el Bien. Confucio lo hace de la forma más rígida. Sus principales preocupaciones son la tradición, la estructura, el deber, la familia, el gobierno y el mantenimiento del orden social. Para él, el Bien, es sencillamente todo lo que sostiene y defiende estos valores.

En la doctrina de los opuestos, el Tao enseña que el bien en estado puro no existe. Laozi cree que sólo reconocemos el bien por comparación con el mal. [...] El bien no es el contrario del mal, sino el complemento, y que todo contiene parte de su complementario. [...]

"Cuando todo el mundo entiende que la belleza es bella, es porque existe la fealdad. Cuando todos comprenden que la bondad es buena, es porque existe el mal".
Laozi

domingo, 16 de octubre de 2011

La carta

Título Original: The Letter
Año: 1940
País: USA
Director: William Wyler
Género: Drama, crimen
Reparto: Bette Davis, Herbert Marshall, James Stephenson, Frieda Inescort, Gale Sondergaard, Bruce Lester, Cecil Kellaway, Victor Sen Yung

SINOPSIS

Leslie Crosbie (Bette Davis) es la esposa de Robert Crosbie (Herbert Marshall), propietario de una plantación de caucho en Malasia. Una noche, ésta asesina a un hombre, supuestamente en defensa propia. Pero, de repente, aparece una comprometedora carta en manos de la viuda, Mrs. Hammond (Gale Sondergaard), cuyo contenido echa por tierra la versión de los hechos de la protagonista.

CRÍTICA

Basándome en la sinopsis, esperaba que la película tuviera más componentes de intriga y de cine negro. Es cierto que resulta más dramática y que la carga de la psicología de los personajes y las relaciones entre ellos es más importante que la investigación como tal. Pese a todo esto, la película sin duda merece la pena, incluso diría que podría considerársela representativa del buen cine americano en blanco y negro. Teniendo presente que la historia transcurre en Malasia, la ambientación resulta impecable. Para lograr este efecto, además de mencionar los medios visuales, merece la pena destacar también la excelente banda sonora. Mi único pero en esta cuestión es la caracterización de un personaje, que comentaré posteriormente.

Persisto en mi idea de adquirir cierta culturilla general sobre directores de cine. Buscando información sobre William Wyler he descubierto datos curiosos. Este alemán que se trasladaría pronto a los Estados Unidos, estaba emparentado con el fundador de los estudios Universal Pictures. Por este motivo, comenzaría a rodar películas desde muy joven. Entre las más destacadas de su carrera se encuentran: "Jezabel - 1938", "Cumbres borrascosas - 1939", "La loba - 1941", "Los mejores años de nuestra vida - 1946" , "La heredera - 1949", "Vacaciones en Roma - 1953", "Horizontes de grandeza - 1958", "Ben-Hur - 1959" o "Cómo robar un millón y... - 1966". Al igual que en "La carta", en varias de sus cintas contaría con Bette Davis, la cual diría en varias ocasiones sobre él que "fue el único director que supo dirigirla correcta y completamente".

Pasemos al excelente reparto de actores. Qué decir de Bette Davis, simplemente comentar que con actuaciones como la de esta película, es de justicia su apelativo "La Primera Dama del Cine en Blanco y Negro" o que fuera nombrada por El American Film Institute "la segunda mejor actriz de todos los tiempos". Fascinante y grandiosa, simplemente por su participación, la cinta no podría ser considerada mediocre.

Para variar, la cara de Herbert Marshall me sonaba pero no era capaz de identificar el porqué. Tras leer la biografía de este actor inglés he recordado que también aparece en "La loba - 1941". Merece la pena mencionar también su trabajo en la cinta de Alfred Hitchcock "Enviado especial - 1940". En "La carta" interpreta al entrañable propietario de la plantación Robert Crosbie. Su actuación me ha parecido muy convincente, siendo imposible no sentir empatía por su personaje. Muy buena nota para él también.

Continuo con James Stephenson, actor inglés que interpreta al abogado amigo de los Marshall, Howard Joyce. Creo que su personaje es uno de los más sugestivos, y en gran medida es gracias a su excelente interpretación. De hecho, fue nominado por ésta al Premio de la Academia al Mejor Actor Secundario. Me ha sorprendido conocer que debutara a la edad de 49 años, por este motivo, y por su inesperado fallecimiento a los 52, su filmografía es reducida.

Pasemos a la actriz estadounidense de ascendencia danesa Gale Sondergaard. En "La carta", interpreta a la "foránea" viuda Mrs. Hammond. Para mí su interpretación quizás sea el único pero de la cinta. Es de justicia comentar que su personaje tiene varios handicaps. El primero es que al suponerlo oriundo de Malasia, apenas tiene diálogo. Por otra parte, su caracterización en el intento de mostrarlo exótico, fracasa estrepitosamente resultando en todo caso estrafalario. Independientemente de esto, además me ha parecido bastante sobreactuada en sus expresiones. Al margen de su interpretación en esta cinta, Sondergaard recibió el Oscar por su participación en la película "El caballero Adverse - 1936", y posteriormente obtuvo una segunda candidatura como mejor actriz de reparto por "Anna Ana y el rey de Siam - 1946". Un par de curiosidades más, se presentó a las pruebas para encarnar a la bruja de "El Mago de Oz - 1939", pero temiendo que el siniestro maquillaje que debería llevar fuera a dañar su imagen y su carrera, rechazó el papel. Por otra parte, fue una de las damnificadas de la "caza de brujas", siendo acusada de pertenencia y apología del comunismo.

Finalizo con el reparto mencionando a Victor Sen Yung. En esta película interpreta al taimado ayudante del abogado, Ong Chi Seng. Otro actor que de nuevo me resultaba familiar, lógico si se tiene en cuenta que este actor americano de ascendencia china, intervino en series de televisión tan populares como "Bonanza" (donde interpretaba al cocinero de la Ponderosa), "Perry Mason", "Superagente 86", o "Kung Fu". En el cine, se puede mencionar su participación junto a Humphrey Bogart en "A través de pacífico - 1942". Su trabajo en la "La Carta", me ha parecido correcto. Infumable eso sí, el desastroso doblaje del personaje al español.

Concluyendo: historia interesante, excelente reparto, sugestiva ambientación ... Buen cine en blanco y negro por tanto, que me parece más que recomendable.

Puntuación:

martes, 11 de octubre de 2011

Cita del día

Indudablemente, el tedio y el aburrimiento, que presumen de haber agotado la variedad y los goces de la vida, son tan viejos como Adán. Pero las capacidades del hombre jamás se han medido; ni nos corresponde a nosotros juzgar por cualquier precedente lo que el hombre puede hacer, pues es muy poco lo que ha intentado.

Henry David Thoreau

lunes, 10 de octubre de 2011

Cita del día

"El mundo entero es una chimenea. ¿Con qué estado de ánimo puede uno evitar quemarse?"
Gao Feng

domingo, 9 de octubre de 2011

El caso de Lucy Harbin

Título Original: Strait-Jacket
Año: 1964
País: USA
Director: William Castle
Género: Thriller. Terror
Reparto: Joan Crawford, Diane Baker, Leif Erickson, Howard St. John, John Anthony Hayes, Rochelle Hudson, George Kennedy, Edith Atwater, Mitchell Cox

SINOPSIS

Hace veinte años, Lucy Harbin despedazó a su esposo y a su amante con un hacha. Después de dos décadas de confinamiento psiquiátrico, sus doctores la declaran preparada para volver al mundo. Sin embargo, el difícil reencuentro con su hija Carol, que presenció los crímenes, y ciertas huellas de su doloroso encierro hacen sospechar que Lucy no está curada como parecía ...

CRÍTICA

Esta película, estéticamente hablando, me ha recordado a la afamada "Psicosis" de Alfred Hitchcock (1960), supongo que por ser ambas coetáneas. No obstante, aquí termina el parecido, pues "El caso de Lucy Harbin" dista mucho de resultar tan original, incluso diría que llega a ser predecible. De hecho, buscando información sobre William Castle, el director de este film, he descubierto que era conocido como "el hermano pobre de Hitchcock". Me ha parecido un personaje muy atípico. Productor de películas tan famosas como "La Dama de Shanghai - Orson Welles 1947" o "El Bebé de Rosemary - Roman Polanski 1968", fue especialmente famoso por los curiosos trucos publicitarios que utilizaba para promocionar los estrenos de sus películas de terror, intentando siempre hacer partícipe al público. Por ejemplo, en "El caso de Lucy Harbin", repartió hachas de cartón ensangrentadas entre los espectadores. Dejo un enlace donde se exponen con detalle otras anécdotas similares de este curioso cineasta.

La película en cuestión cuenta con Joan Crawford dando vida a Lucy, la protagonista. Esta glamurosa actriz americana, fue una de las pocas de la época muda capaz de adaptarse al cine sonoro de Hollywood.   Durante la década de los 30, participó en muchas películas de la Metro haciendo de partenaire de Clark Gable. A comienzos de los 40, cambiaría a la Warner, y en 1945 recibiría su único Oscar por su interpretación en "Alma en suplicio - 1945". Años después, en 1962, protagonizaría junto a su gran enemiga Bette Davis "¿Qué fue de Baby Jane?", quizás su última película importante. En 1965 volvería a colaborar con el director de "El caso de Lucy Harbin" en el film "Jugando con la muerte". Algunas curiosidades al margen de lo profesional: en los años 70 se introdujo en la Iglesia de la Cienciología, y de ella Bette Davis llegó a decir: "Se acostó con todas las estrellas de la Metro, excepto con Lassie."

Pasemos a Diane Baker, actriz estadounidense que da vida a Carol, la hija de Lucy. Su interpretación está completamente a la altura de la de Crawford, siendo sin duda, el trabajo de ambas lo más destacable de este film. Volviendo a Diane, cabe mencionar su participación en películas como "Marnie, la ladrona - 1964" o "El silencio de los corderos - 1991". Por otra parte, además de trabajar en cine, ha colaborado también en series de televisión, como por ejemplo en la conocida House, dando vida a Blythe House, madre del protagonista.

Del resto del reparto mencionar a Leif Erickson, actor que interpreta a Bill, el bondadoso hermano de Lucy. Dento de la filmografía de este actor secundario merece la pena comentar su participación en otras películas de intriga como "Voces de Muerte - 1948", o "Nido de víboras - 1948". Finalmente, George Kennedy, que en esta ocasión encarna al secundario Leo Krause, uno de los trabajadores de la granja de Bill. Kennedy es un actor estadounidense conocido por sus trabajos en "Charada - 1963" y en "La leyenda del indomable - 1967". Por ésta última obtendría un Oscar al mejor actor de reparto.

Poco más que destacar de "El caso de Lucy Harbin". Aunque dista de ser una película representativa del cine de terror, resulta entretenida.

Puntuación: